Fecundación İn Vitro

En el desarrollo normal de un embrión al 5 día se desprende la capa pelucida que recubre el embrión y este sale al exterior preparado para fijarse al útero. Este proceso se denomina eclosión.

Algunos casos la imposibilidad de embarazo es causada por un problema en esta fase, el embrión es incapaz de eclosionar por lo que no se puede adherir al útero prara continuar el proceso. En los casos en los que existe este riesgo se procede a transferir el embrión al útero una vez eclosionado de manera que se pueda adherir aumentando así la posibilidad de embarazo. Antiguamente se usaba el método mecánico de eclosinar el embrión ahora se usan tanto un tipo de ácido o mediante láser.

En relación al embarazo el punto más crítico es la implantación del embrión en el útero. El proceso de implantación se divide en dos períodos: un periodo preimplantatorio, durante el cual ocurre la preparación del endometrio, la preparación del ovocito y la aposición; y un periodo implantatorio que a su vez de divide en adhesión, ruptura e invasión. Existe un periodo llamado ventana de implantación en el cual el útero se encuentra en su máxima capacidad receptiva, caracterizado por cambios en las células del endometrio que contribuyen a la absorción del fluido uterino, acercando al blastocito a la superficie celular endometrial y favoreciendo su inmovilización, aunque durante esta fase el embrión puede ser eliminado por arrastre.

Para facilitar todo este proceso de implantación, se reproducen las condiciones adecuadas en el laboratorio. Esta técnica se realiza de forma mecánica con una pipeta muy fina o puede realizarse con un tipo de ácido o láser.

Usos del láser en la Inseminación Artificial.

Con la tecnología superior del sistema láser (non-touch lazer micro-drilling) sin necesidad de tocar el embrión, haciendo las secciones perfectamente micras se procede a la eclosión (Assisted Hatching) del mismo brindándole así algo de ayuda. Este método está recomendado en parejas de mayor edad o que hayan tenido problemas o dificultades con terapias anteriores. Además con este método se eliminan los tóxicos biológicos (fragmentación) y se limpian los desechos (desfragmentación) antes de la implantación en el útero de la futura madre de esta manera aumenta la calidad del mismo. Este uso del láser ha sido utilizado y se practica en Australia, Italia y América con resultados muy positivos, en Suiza es donde se han obtenido resultados impresionantes. El resultado más sorprendente es un caso en el que se obtuvo el embarazo a la décima vez. En general se obtienen resultados de embarazo positivos al tercer o cuarto intento. La edad de los progenitores es uno de los factores que están relacionados con la efectividad de la técnica, una de las dificultades es cuando la edad de la mujer es superior a la del hombre debido a la disminución de las condiciones de adherencia en el útero. Mediante el uso del láser podemos facilitar la adherencia en este tipo de pacientes aumentando el número de embarazos considerablemente. Se ha utilizado este método en mujeres mayores de 38 años sin producir ningún daño en el embrión.

Con ayuda del láser podemos proceder a la eclosión del embrión y su implantación en mujeres de mayor edad que pueden presentar problemas en esta etapa ya que en condiciones normales el útero se presenta a mayor edad más grueso lo que dificulta el proceso además de haber sufrido un exceso de micro-inyecciones o intentos de inseminación artificial anteriores sin éxito. Con este método, con ayuda del láser, se consiguen resultados positivos de embarazo a la tercera, cuarta e incluso en algunos casos a la novena vez.